sábado, 26 de septiembre de 2009

No soy feliz.
Falta felicidad en mi vida.

Puedes creerlo amor, si supieran que realmente felicidad es lo que me sobra, que no necesito nada de eso, que no me hace falta; porque te tengo a ti y tengo a cada una de esas hermosas personas con las que comparto mis días. Son esa felicidad, alegría, cariño, travesura y sobre todo amor que me hace querer seguir con mi vida, por lo cual no me doy por vencida.


Cursi, cursi, cursi.

Como hacerles ver que no soy la persona que todos creen, pueden llamarlo hipocrecia, o como quieran no me importa, pero no es así para mí, simplemente es no poder enseñarles la verdadera persona que soy; no me avergüenzo de mi forma de ser, no me arrepiento de lo que he hecho, hago y haré, soy como soy y me encanta.

Tímida, callada, sangrona, una persona a la cual le falta felicidad.


Tímida a lo mejor cuando todavía no conozco a las personas y no les tengo confianza; callada de vez en cuando es muy raro pero lo puedo lograr; sangrona cuando quiero y lo hago muy bien; una persona infeliz eso si no creo, tengo más felicidad de la que pudiera pedir, pero cuando una persona realmente no me conoce es lo que piensa. Mira esa sangrona, prepotente, enojona , me encanta que piensen eso de mí, es lo que me mantiene así, lo que hace que yo quiera seguir pareciendo ese tipo de persona.


Alegre, traviesa, habladora, buena amiga, parrandera, carrilluda, perfeccionista.


Soy lo primero y lo segundo, cuando conozcas las dos partes de mí sabrás que eres una de esas personitas que son mi motivación; sino o de plano no lo eres o no he tenido la oportunidad de "abrirme" completamente o ser sincera con mi forma de ser.

No hay comentarios:

Publicar un comentario